Esta Vez, ¡No Perderé!’
Capítulo 271

Capitulo 271 

Capítulo 271 

Todos en el lugar entendían que Javier y Mauricio tenían problemas entre si. Antes, Mauricio solía tener mucha presencia, pero ahora deseaba recuperar su dignidad frente a todos, aunque temía las consecuencias de enfrentarse directamente a Javier. Si se enfrentaba ablertamente a Javier, cualquier represalia pareceria justificada. 

Fiorella echó un vistazo furtivo a Javiery, mordiéndose el lablo, se levantó con una copa de vino en la mano: “Sr. Mangone, Mauri se equivocó con lo que dijo, yo pido disculpas por él y me castigaré con tres copas“. Después de decirlo, Fiorella bebió rápidamente tres copas de aguardiente. 

Quizás por el efecto del alcohol, los ojos de Florella se enrojecieron. Luego, miró a Beatriz: “Lo siento, hermana Bea, no debería haber venido con Mauri… Si Mauri no hubiera venido, tú, con todo lo ocupada que estás, tampoco estarías aqui hoy“. Las palabras de Fiorella sonaron extrañamente ambiguas, como insinuando que Beatriz habia venido por Mauricio, mientras miraba fijamente a Javier. 

Javier, por su parte, no miraba a Fiorella; su mirada se centraba en Beatriz, profunda, como perdido en sus pensamientos. Beatriz se sintió incómodamente fría. Empezó a lamentar haber venido a esta reunión de excompañeros. Ser objeto de chismes era lo de menos; al fin y al cabo, no era algo nuevo para ella. Su mayor arrepentimiento fue haberle contado a Javier y haberle traido también. Beatriz no sabia por qué se sentia culpable, pero simplemente lo estaba. 

Tomó un sorbo de jugo de naranja: “Martin y Esther están aqui; vine con mis amigos. Mientras ellos estén, yo estaré presente. Fiorella, estás pensando demasiado“. 

Fiorella seguia con su actitud de victima: “Lo siento, hermana Bea, lo que digas está bien“. 

En ese momento, Beatriz realmente quería darle una lección. 

Sin embargo, la presencia de Javier hizo que algunos compañeros empezaran a ver a Fiorella con malos ojos. Antes de que Javier llegara, Fiorella había insinuado que Beatriz se había casado con un hombre feo y mayor, haciendo que todos lamentaran la suerte de la antigua reina de belleza, Ahora, las mentiras de Javier, alguien pudiera seguir Fiorella quedaban al descubierto. Nadie creía que, después de conocer pensando en Mauricio. Además, esos eran asuntos de la época escolar, ¿quién seguiria preocupándose por ellos después de entrar en la vida adulta? Las compañeras casadas encontraban aún más inapropiados esos comentarios. Hablar así delante del esposo de alguien era claramente provocar problemas. 

Al final, Beatriz y Javier salieron juntos hacia el estacionamiento, Fiorella podía sentir que, desde sus comentarios, Javier se había vuelto más frío. Estaba segura de que Javier y Beatriz tendrían una discusión esa noche y su relación se vería afectada. Mientras se regodeaba con esos pensamientos, vio cómo Mauricio se marchaba solo en su Porsche, dejándola atrás. Los demás compañeros que habían venido en coche la miraban con una mezcla de burla y compasión. 

“Fiorella, ¿Mauricio se fue sin ti?” “Ahora tendrás que bajar y tomar un taxi, no vamos en la misma dirección.” “Es lo que pasa cuando té relacionas con alguien por su situación económica, siempre hay sacrificios.” “…” 

Fiorella, incapaz de mantener la fachada de dulzura, finalmente mostró su verdadera cara: “Después de tanto tiempo, seguir conduciendo un coche de tan poco valor, parece que tu esposo no lo está haciendo muy bien“. 

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