Un Beso Que Le Atrapó A Mi Señor Perfecto Novela Completa
Capítulo 1564

Capítulo 1564 

Gaspar agarraba fuertemente la mano de su madre. “¡No! Mamá, ¡Por supuesto que quiero ir contigo!” 

Hacía muchos dias que no veía a su hijo, y aunque Esther estaba molesta con él porque solia desaparecer, no podia evitar preocuparse por él. Acarició suavemente la cara del niño y le preguntó en voz baja, “Ya almorzaste?” 

Gaspar asintió. “Si, ya comi.” 

Esther se quedó en silencio por un momento antes de preguntar, “¿Y el…?” 

Gaspar ladeó la cabeza, “Mama, ¿te refieres a si el guapo papa ya comió?” 

Esther asintió con cierto disgusto 

Gaspar respondió: “El ya comió Comimos juntos antes de que Sofia se fuera.” 

Después de escuchar la respuesta de Gaspar, Esther observó detenidamente el interior de la casa…. 

“¡Vamos, mamál Vamos a ver cómo le va al guapo papá con su rehabilitación!” Dijo Gaspar, mientras tiraba de la mano de Esther en dirección al dormitorio 

Esther camino a regañadientes detras de su hijo, apenas había salido de esa habitación. 

Al abrir la puerta, vieron la imponente figura del hombre practicando con dificultad sus pasos en el balcón, sudando profusamente 

Sus piernas Parecias haber sufrido una severa atrofia muscular y las posibilidades de que pudiera caminar por si mismo eran escasas. 

Pero, el parecia que no se habia rendido. 

Gaspar se sintió un poco mal por Romeo y preguntó en voz alta: “Papa‘ ¿Quieres agua? ¡Puedo traerte una botella“” 

Romeo giró la cabeza hacia ellos, y con esfuerzo respondió, “No, no tengo sed.” 

Esther levanto la barbilla, “Ve y trae una botella de agua para tu guapo papa.” 

“Wale Gaspar corrió a buscar el agua al oir las instrucciones de su madre. 

Después de ver a su adorable hijo correr, Esther volvió su mirada hacia Romeo, quien seguía practicando con todas sus fuerzas. Se acercó a el y le recordo. “La rehabilitación es un proceso que debe seguir un ritmo gradual, no debes apresurarte.” 

Romeo la miro de reojo, pero no respondió y continuó con su práctica 

Esther decidió no insistir en el tema y se recosto en el marco del balcón, observándolo mientras Gaspar volvia con una botella de agua. 

“¡Guapo papa, aqui tienes agua!” Gaspar le ofreció la botella de agua con las dos manos. 

Romeo miro a su hijo y decidió no rechazarlo, pero necesitaba ambas manos para poder sostenerse. Si hacia uso de cualquiera de ambas 

manos, caeria 

En ese momento, Esther camino hacia ellos, tomó la botella de agua, abrió la tapa y la llevó a los labios de Romeo… 

Romeo la miro sorprendido. 

El rostro de Esther estaba serio y preguntó: “No la vas a beber? ¿Cuánto tiempo quieres que te la sostenga?” 

Romeo frunció el ceño, pero sintió que no era correcto rechazarla, asi que abrió la boca y tomó un par de tragos. 

Esther retiró la botella y, en lugar de poner la tapa de inmediato, tomó un trago ella misma antes de cerrarla lentamente. 

Romeo la miró sorprendido por su naturalidad, pero decidió no decir nada y continuó con su práctica. 

Esther llevó a Gaspar a una silla de mimbre apartada para que no estorbara y desde alli observó a Romeo en silencio, ocasionalmente revisando su teléfono 

Media hora después, Romeo estaba empapado en sudor, pero parecía más estable que antes 

Decidió que era hora de volver a la silla de ruedas para descansar un rato.. 

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