Capítulo 2316 

Leonardo se detuvo de repente al escucharla y, bajando la mirada, le pidió disculpas con seriedad. 

“La regué, dije algo que no debía, no debi ser tan bocón. Lo siento, te prometo que no volverá a pasar.” 

Al encontrarse con esa mirada tan sincera de Leonardo, Maira sintió cómo el nudo en su garganta se 

desataba. 

Mordió su labio inferior, con los ojos húmedos, pero estaba decidida a no derramar más lágrimas. 

“Ya, está bien que reconozcas tu error. Claro que no era mi culpa, pero llegaste echándome la bronca sin 

más.” 

Las lágrimas de Maira rodaron por sus mejillas hasta caer en el brazo de Leonardo. Aunque llevaba manga larga, las lágrimas de Maira le quemaban como fuego. 

Jamás había imaginado que su descuido pudiera causar tanto dolor a Maira, ni que a pesar de su apariencia desenfadada, ella guardara tantos sinsabores y esfuerzos en su corazón. 

Ella era buena actriz, por eso nadie había notado su dolor. 

Con voz ronca, Leonardo se detuvo y miró fijamente a Maira en sus brazos, “Lo siento, te pido disculpas una vez más.” 

Maira no sabía si podía confiar en este hombre. Ya habían tenido peleas anteriormente y siempre se disculpaba. 

Pero cuando se trataba de Rita, parecía que siempre era relegada al segundo plano. 

Si no podía ser el número uno en su corazón, ¿cómo podría decir que realmente lo tenia? 

Lo que Maira queria no era un poco de amor, sino su completa devoción. 

Leonardo 

Se aferró a él con fuerza, dejando las preocupaciones para más tarde. Por ese momento, lo tenía todo para ella. 

Cuando Brenda vio a Leonardo regresar con Maira entre sus brazos y, pegó un brinco, “¡Ay, ¡qué pasó aquí! ¿Mairita se lastimó?” 

Rita se puso pálida de envidia; ella había pedido a Leonardo que la llevara en brazos y él ni caso le hizo, pero con Maira era otra historia. 

¿Qué mañas se traería esta mujer? Si no hubiera sido por vuelto cargándola? 

su propuesta, ¿cómo podría Leonardo haber 

Al ver a los abuelos Ibarra acercarse a Maira con tanto cariño y preocupación, Rita se moría de celos por 

dentro. 

“No es nada grave, abuela, solo me tropecé y creo que me torci el tobillo.” 

Las marcas de las lágrimas aún estaban en el rostro de Maira, pero afortunadamente ya estaba oscureciendo y la anciana había apagado la linterna para no deslumbrarla. 

Si pudiera ver las lágrimas, seguro que se preocuparía aún más. 

Pero la anciana conocía bien a Maira; sabía que, si decía algo así de tranquila, era porque en realidad no era nada serio. 

Si no fuera grave, jamás hubiera permitido que Leonardo la cargara hasta casa. 

16:15 M 

Capitulo 2316 

“Niña tonta, ¿otra vez intentando ocultarme cosas? Ya estás con nosotros, si te duele o te lastimaste, tienes que decírmelo. 

Voy a cuidarte, hoy solo fue un accidente, pero si estás lastimada, mejor vamos al hospital. 

Tu abuelo ya habló con los coordinadores, y ellos están volviendo.” 

Leonardo sostenía a Maira con firmeza, sin permitirle bajar, 

Al sentir su resistencia, la abrazó aún más fuerte para evitar que se moviera. 

“Si te lastimaste, ¿bajarte no empeoraría la cosa? ¿Acaso no quieres volver al set?” 

Convencida por las palabras de Leonardo y los consejos de la anciana, Maira finalmente se quedó tranquila en sus brazos. 

Cuando sus miradas se cruzaron accidentalmente con las de Rita, Maira vio la hostilidad sin disimulo en sus ojos y le devolvió la mirada con calma. 

Si ella no se molestaba en ocultar sus emociones, entonces Maira tampoco tenía por qué esforzarse en 

caerle bien. 

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