Capítulo 733 

“Si, jefe“. 

Pascual salió del vestuario, mientras Oriol estaba sentado en la sala de descanso, bebiendo casualmente el té de la mesa

Afuera del casino, numerosos jugadores empezaban a entrar. 

El Sr. Dionisio acababa de lidiar con Natalia y, al bajar, se encontró con Catalina entrando al casino. 

El lugar estaba lleno de la melodiosa música de piano, y Catalina vio a Fernanda tocando en el segundo piso desde que ingresó. 

La música de Fernanda era pura, haciendo que cualquiera que la escuchara se sintiera relajado y contento. 

“Srta. Ojeda… ¿Cómo viene a esta hora?” 

El color de la cara del Sr. Dionisio cambió al ver a Catalina, era demasiado tarde para avisara Oriol. 

Catalina soltó una risa fría y dijo: “Si no venía, ¿cómo iba a saber que alguien ya había tomado mi lugar?” 

Catalina se dirigió rápidamente hacia arriba, atrayendo la atención de todos. 

Al llegar arriba, lo primero que hizo Catalina fue abofetear a Fernanda. 

¡Plaf

El sonido claro resonó por todo el casino, y todos guardaron silencio. 

Todos sabían que Catalina era la futura prometida de Oriol, y además era la hija de la familia Ojeda. Aquí, en San Cristóbal Alto, cualquiera que molestara a Catalina no tendría un buen final. 

Fernanda fue golpeada tan fuerte que su rostro instantáneamente mostró tres marcas rojas de sangre. 

Las uñas largas y afiladas de Catalina claramente habían sido utilizadas con fuerza. 

Entonces Fernanda se dio cuenta de la mujer que tenía enfrente tenía una belleza que llegaba hasta los huesos, pero con un aire de mundanidad que era difícil de describir. 

“¡Srta. Ojeda!” 

El Sr. Dionisio se sobresaltó, e inmediatamente le hizo una señal a sus subordinados para que fueran a buscar al Sr. Lobo. 

En esta situación, solo la presencia del Sr. Lobo podria calmar las cosas. 

Fernanda, confundida, preguntó: “Srta. Ojeda, ¿qué está haciendo?” 

¿No ves lo que estoy haciendo?” 

Catalina levantó la mano de nuevo, lista para dar otra bofetada, pero alguien le agarró la muñeca con fuerza. 

Al voltearse, Catalina vio que Oriol habia aparecido detrás de ella sin darse cuenta. 

Viendo el rostro sombrio de Oriol, Catalina dijo furiosamente: “Oriol! ¡Me mentiste!” 

¿Te menti sobre qué?” 

¡Dijiste que la despedirías! ¿Cómo pudiste engañarme?” 

Catalina retiró su mano, haciéndose la dolida pero no consiguió ni un poco de simpatía de Oriol. 

Oriol, fríamente, dijo: “También dije que ya no necesitabas venir, ¿por qué no escuchas?” 

“Si no venia, ¿cómo iba a saber que habías elegido a otra mujer sobre mi?” 

Ella había estado en el casino el Grupo Lobo tanto tiempo por Oriol, haciendo conexiones por él, pero el compromiso parecía estar cada vez más lejano, Oriol había elegido a otra mujer para reemplazarla tocando el piano aquí. 

Oriol, claramente impaciente, se frotó la frente y dijo en voz baja: “Pascual, llévatela“. 

“Si, jefe“. 

“¡Oriol! Pero….” 

Catalina iba a hablar, pero la mirada de Oriol se volvió repentinamente fría, bajando la voz para decir firmemente: “Si sigues haciendo escándalos, no me culpes por ser duro contigo“. 

De repente, el impetu de Catalina disminuyó, y Pascual se acercó diciendo: “Srta. Ojeda, por favor“. 

Al escuchar esto, Catalina miró ferozmente a Fernanda y, con los dientes apretados, dijo: “Está bien que me vaya, pero esa mujer, también debe irse!” 

Sᴇarch the FindNovel.net website on Gøøglᴇ to access chapters of novels early and in the highest quality.

Tip: You can use left, right keyboard keys to browse between chapters.Tap the middle of the screen to reveal Reading Options.

If you find any errors (non-standard content, ads redirect, broken links, etc..), Please let us know so we can fix it as soon as possible.

Report
Hᴇlp us to clɪck the Aɖs and we will havε the funds to publish more chapters.