Niña en sus ojos Reina en su tierra (Jazmín) novela completa
Niña en sus ojos Reina en su tierra Capítulo 262

Capítulo 262 

“Esto está demasiado mro!” 

“La Srta. Sofia debe estar loco, siento como si estuviera paselda” 

“Yo también creo que está poseida, quizás le hicieron algún tipo de brujeria” 

“Escuché que Jazmin vino de una zona montañosa remota, de esos lugares profundos y selvaticos, capaz si sabe hacer alguna magia.” Los rumores volabon por todos lados. 

Todos pensaban que algo andaba mal con Sofia, que parecia estar fuera de si 

Incluso hubo quien sugirió si no deberían “rescator” a Sofia, ya que parecía estar completamente bajo el control de Jazmin.. 

Pero Jazmin, ya señalada como una hechicera capaz de controlar a las personas, se mantenia al margen con una actitud indiferente. Observaba a Sofia, ya desesperada y deshecha, con un tono de voz tranquila: “Señorita Sofía, suélterne por favor. Me está lastimando.” Safia se sobresalto y luego soltó la mano rápidamente. 

“Lo siento, Jazmin.” Sus ojos se llenaron de lágrimas, cargados de temor y nerviosismo, teniendo haberla enfadado y que ya no quisiera curarla, disculpándose humildemente, “No fue mi intención, lo siento de verdad.” 

Jazmin se frotó el lugar que había sido apretado por ella, sacó un libro del cajón del escritorio y, después de hojearlo por un minuto, finalmente levantó la vista hacia Sofia y le dijo con calma: “Señorita Sofia, ¿me dijo que puede darme su casa, su cano y todo au dinero?” 

“Si!” Sofia asintió de inmediato, “Con tal de que puedas cumme, te lo daré todo.” 

Al fin y al cabo, lo matenal no es lo más importante en comparación con su vida 

Si todavia tienes vida, puedes volver a ganar dinero, comprarte casas y carros. 

Pero si pierdes la vida, de nada sirve tener todo eso. 

“Pero, ¿está segura, Srta. Sofia, de que todavia tiene una casa y un carro para vender? ¿Cuánto dinero realmente puede darme?” Jazmin terminó de leer la página del libro, apartó la vista de las hojas y finalmente levantó sus ojos hacia Sofía, quien estaba de pie a su lado, luciendo derrotada y desgastada. 

Sofia se quedó sin palabras por un momento y luego recordó aquella tarjeta bancara que apenas tenia unos pocos cientos. 

Y la 

a casa que compartia con Emesto, comprada antes de casarse, era propiedad personal de él. 

Aunque ella también ayudaba a pagar la hipoteca todos los meses 

Pero si se divorciaban, esa casa no tendría nada que ver con ella 

Después de casarse, cada uno compró un carro. 

Pero Ernesto le dijo que el camo de un hombre era su carta de presentación y que tener un buen carro facilitaba los negocios, asi que el carro de Emesto era bastante caro, costando cerca de un millón. 

Y el carro de ella.. 

Penso que con tener un medio de transporte era suficiente, su camo no costó ni una décima parte del de Ernesto. 

Además, ya tenia varios años de uso. 

Si lo vendiera como carro usado, a lo mucho sacarlà dos mil o tres mil. 

En ese momento, Sofia se dio cuenta de que en este matrimonio, realmente no tenía nada. 

Si se divorciaba de Ernesto. 

Literalmente quedaría en la calle. 

De pronto, su rostro se volvió pálido, sin un apice de color, la rabia y la desesperación se entremezclaban mientras su cuerpo temblaba incontrolablemente. 

La pena que reflejaba su rostro era tal que incluso los estudiantes que miraban empezaron a sentir lastima por ella. 

“Pobre Srta. Sofia, se ve tan triste. Dijo que queria que Jazmin la curara, ¿está enferma? Pero, ¿cómo va Jazmin a curarla? ¿Por qué le pidió a Jazmin que la curara?” 

“Debe estar enferma, se ve realmente abatida.” 

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